En pleno corazón de San Telmo (Bolívar 914), se encuentra Estación Colombia, que abre sus puertas de miércoles a viernes, de 17 a 23, y los fines de semana desde las 13.
Leonardo López Aguilar, dueño y creador, junto a María Tebaldi, su mujer y cocinera, definen a su restaurante como gastronomía de la nostalgia, porque funciona para que los colombianos se sientan en casa y para que los argentinos, así como los viajeros internacionales que hayan pasado por Colombia, puedan recordar los sabores que allí han probado.
Les preguntamos qué nos recomendaban probar para llevarnos una muestra contundente de los sabores colombianos, y nos indicaron que pidiéramos unas empanadas, unos patacones y el plato más representativo de la carta, según su mirada, que es el ajiaco.
Las empanadas son de masa de maíz amarillo, y el relleno más característico, y el que probamos, es de carne desmechada y papa. La crocancia de la masa y la suavidad del relleno las hacen verdaderamente deliciosas. En la porción vienen tres unidades, y las sirven acompañadas de hogao, una salsa salada hecha a base de tomate y cebolla junca, una preparación muy típica que a veces actúa como sofrito y otras directamente como guarnición. Además, también tienen empanadas de camarón, veganas y hawaianas, que son rellenas de jamón, queso y piña.
Otro de los platos típicos de piqueteo colombiano son los patacones, plátano verde aplastado y luego frito. También vienen tres unidades en la porción, que quedan crujientes e ideales para untar. Se sirven con las mismas variedades que pueden salir las arepas: con carne desmechada, o bondiola, o queso costeño, o con escabeche de hongos, o simplemente solas, pero siempre con hogao y una mousse de palta. Cualquiera de ellos, acompañados de unas cervecitas, son el combo perfecto del piqueteo estival.
Llegó el momento del ajiaco, una sopa de choclo y papa característica de los pueblos originarios andinos de Colombia, que luego fue tomada y modificada por los españoles, agregándole pollo y, más adelante, crema de leche y alcaparras, generando una consistencia cremosa que la hace, además de irresistible, una muestra clara de la influencia hispánica sobre los pueblos de América. Cuando nos recomendaron este plato en pleno enero, la verdad es que lo dudamos, pero ahora podemos asegurarles que no se van a arrepentir de pedirla en ningún momento del año, porque es increíble.
Los fines de semana, y especialmente los domingos, se preparan platos especiales que están fuera de la carta y los anuncian a través de Instagram (@estacion_colombia). La tan aclamada y de difícil preparación arepa de huevo también la hacen con aviso previo por redes y con la cartelería del lugar. Muchos clientes ya les encargan arepas previamente para desayunar y las terminan de cocinar en su casa.
En cuanto a las bebidas, probamos Flor de Jamaica, una infusión de hibiscus fría, pero nuestra preferida fue el Aguapanela con limón, una limonada a base de panela, que es un edulcorante natural que se obtiene del jugo de la caña de azúcar, sin refinar. Es refrescante y deliciosa. Pero también van a encontrar jugos de mango, maracuyá, guayaba y guanábana con agua o con leche.
Ya sea por nostalgia o por curiosidad, Estación Colombia es una parada obligatoria en el viaje de sabores de otras tierras que se pueden disfrutar en Buenos Aires.
Licenciado en Comunicación Audiovisual (UNSAM) y Locutor Integral de Radio y TV, con más de 15 años de experiencia en radio. Sus raíces familiares provienen de Génova, Asturias y Polonia.
